Asunción poética en sus propias palabras

Si hay algo que aprendimos de la pandemia fue la capacidad de conectarnos con esas  personas que las cuestiones geográficas nos alejan pero el hilo conductor poético nos demuestra que nos conocemos de toda la vida aunque no nos diéramos cuenta de ello. Dos ejemplos son Edu Barreto y Miliki Chaves, poetas paraguayos de Asunción. Militantes poéticos con 2 proyectos hermosos: BienCerca y Bitacora de un Encierro, respectivamente. A continuación nos cuentan más en detalles sobre los mismos.

Ludoviko Romero: ¿Cómo surge la idea de Bien Cerca y quiénes forman parte?

Edu Barreto: Las ganas imperiosas de difundir la poesía y a les poetas que hacen años me acompañan, me llevaron a pensar en esta acción. Cómo ofrecer poesía en el espacio público sin que fuera una tertulia, un evento o una amenaza. Sí, una complicidad. Los juegos del teléfono cortado en la infancia, las mujeres de mi casa que hablaban guaraní con cierta cadencia, contándose secretos en la dictadura más larga de esta región, decantaron en esta invasión de la zona personal, que es BienCerca. Desde febrero de 2016 en Asunción, me acompañaron poetas geniales que dejaron su voz en mucha gente que se nos acercó. Actualmente BienCerca lo componen Cony Oviedo, María Esther Zaracho, Élian Cabrera, Camila Arcondo y Jimena Gómez.
Por la pandemia migramos a los audiopoemas íntimos vía Whatsapp todo este 2020.
Desde enero de 2017 BienCerca tiene su versión montevideana formado por Ana Strauss, Pabloski Zzi y Tere Korondi, poetas amorosxs que decidieron replicar BienCerca en plazas y parques de esa hermosa ciudad.

LR: ¿Cuál es la situación de la poesía en la literatura paraguaya?

EB: ¡Qué pregunta! Mi sesgo personal te puede hablar de lo que leo: producción autogestionada de poetas que se autopublican y sellos independientes presentes en ferias que se salen de las lógicas del mercado. Literatura que aborda lo que actualmente nos cruza: poesía y narrativa que instalan temas aún tabúes en este laberinto llamado Paraguay: el cuerpo, el género, la disidencia sexual, las mujeres, la migración, la resistencia. Esto desde mi ser asuncioncéntrico. Mi deuda es indagar en lo que se escribe más allá de Calle Última, límite urbano donde termina Asunción y comienza el verdadero país.

LR: ¿Cuándo te diste cuenta de la importancia de la movida poética que estaban
generando?

EB: En los primeros sábados de ese 2016 la gente empezó a formar fila en las plazas, empezaron a devolvernos el gesto leyéndonos poemas de su autoría y la complicidad a partir del poema dicho en voz baja en medio de un espacio con su propio panorama sonoro. Durante la cuarentena más dura fuimos la compañía de gente que está fuera del país y un poema leído con nuestro acento reconfortaba, acompañaba, reparaba.

LR: ¿Qué nos recomendas de literatura paraguaya?

EB: Las mujeres que van quebrando esta ciudad que las quiere oprimir y ellas abren cuñas para colarse y resquebrajar las estructuras. Desde las que nos abrieron camino como Carmen Soler, Ester de Izaguirre, Ida Talavera, Josefina Plá hasta las que actualmente siguen bordando esas palabras que van a sacudir todo como Susy Delgado, Amanda Pedrozo, Shirley Villalba, María Esther Zaracho, Giselle Caputo, Magui Torres, Lía Colombino, Aida Risso, Graciela Delgado. Y la voz trans de Élian Cabrera que da vuelta todo lo conocido hasta ahora.

LR: ¿Por qué es necesaria la poesía?

EB: Nos hace cómplices para vengar cosas que no podemos en la realidad. Reconstruye
puentes. Sutura heridas para seguir caminando. Aniquila las violencias, en especial
la distancia.

Ludoviko Romero: ¿Cómo surge la idea de Bitácora de un encierro y quiénes forman parte?

Miliki Chaves: La Bitácora de un Encierro nace en el periodo de cuarentena obligatoria, en Asunción, Paraguay. Tres amigos decidimos crearla para mostrar nuestro trabajo, con la intención de acercar a las personas a través de la poesía, abriendo el espacio para que personas interesadas en compartir sus escritos puedan encontrarse con quienes quieran leerlos. 
La Bitácora inicia con un grupo de tres amigos: Nico Iranzo, agrónomo y poeta, nómada latino de familia argentina y paraguaya; Fer Centurión, cantautor, guitarrista, y productor musical de Asunción; y Miliki (Alfredo Chaves), actor, director, dramaturgo, realizador audiovisual y gestor cultural asunceno. Por cuestiones laborales, Fer decidió acompañar al proyecto como colaborador artístico. Ante la necesidad de establecer un equipo de trabajo para sostener el espacio, la diseñadora gráfica, fotógrafa feminista y poeta Jess Rivas se unió al equipo gestor, en conjunto con Kike Covalente, músico multi instrumentista, productor musical y editor de video, quienes conforman el equipo de Contenidos.

LR: ¿Cúal es la situación de la poesía en la literatura paraguaya?

MC: La poesía paraguaya vive y resiste hace décadas, con letras que denuncian y desgarran, como también abrazan y suturan. Pese al abandono del Estado, la poesía paraguaya continúa produciendo, ya sea al margen, en lo precario de la clandestinidad, pero continúa. Y no muestra indicios de detenerse. 
Tenemos varios proyectos auto gestionados de poesía o literatura presentes, como la editorial Aike Biene, la librería Casiopea Libros, los centros culturales Literality y Traga Luz, los proyectos Bien Cerca y Slam En Voz Alta, el festival de poesía Ombligo Lírico, entre otros espacios. 
Eso sí, el abandono estatal es notorio. No tenemos ley del Libro, ni de la Biblioteca, ni algún tipo de impuesto o recaudación destinada al desarrollo literario. En el contexto de pandemia, el Estado respondió a los reclamos de los gremios artísticos organizados aprobando la creación de un fondo de emergencia destinado a los subsidios para artistas y gestores culturales, medida dirigida al grueso del sector cultural, sin abordar las necesidades específicas de las distintas disciplinas. 

LR: ¿Cuándo te diste cuenta de la importancia de la movida poética que estaban generando?

MC: Al recibir los formularios de la primera convocatoria para publicar un fanzine digital de poesía. Recibimos más de 40 formularios, varios llevaban una dedicatoria adjunta (o inclusive cartas) en las que varies participantes expresaban mucha gratitud y contento por la existencia de un espacio como la Bitácora. Esa y otras devoluciones positivas que tuvimos, desde el primer día de existencia, nos hicieron caer en la cuenta del valor que tienen los espacios de expresión colectiva e intercambio, principalmente en este periodo de tanta incertidumbre. 

LR: ¿Qué nos recomendás de literatura paraguaya?

MC: Primero, poetas muertxs:
– Carmen Soler
– Josefina Plá
– Herib Campos Cervera
– Elvio Romero
– Esteban Cabañas
– Ida Talavera
– Elsa Wiezell
– Manuel Ortiz Guerrero
– José María Gómez Sanjurjo
Segundo, poetas vivxs:
– Chiquita Barreto
– Jacobo Raushkin
– Shirley Villalba
– Cristian Kent
– Giselle Caputo
– José Cabrera
– Élian Cabrera
– Edu Barreto
– Lía Colombino
– Damián Cabrera
– Andrés Ovelar
– Bomsái Holiday
– Magui Mendieta
– Lourdes Benítez
– Rebeca Benítez
– Eulo García
– Fachu Aguilar
– Aída Risso
– Raquel Chaves
– Laura Mandelik
– Julieta Benjamín
– Ronald Von Knobloch
– Rocío Díaz

LR: ¿Por qué es necesaria la poesía?

MC: Porque nos sirve como aproximación a la condición humana. Aparte de ser un documento histórico, es una cartografía del sentir humano a lo largo del tiempo. Como también, es el juego inteligente y sensible que toda estructura necesita (el lenguaje). Porque en esa capacidad de inventar lenguaje, les mortales podemos asomarnos a la libertad, y al publicarla, socializamos liberación. Y porque para todo aquello que el lenguaje y el pensamiento humano no logren abarcar, siempre va estar la poesía, como único espacio de diálogo con lo indecible e incomprensible. No creo que alguna de las anteriores sea más importante que la otra.

Contacto:
BienCerca
https://www.instagram.com/biencerca/

Bitácora de un Encierro
https://www.instagram.com/bitacoradeunencierro/

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