Los procesos de Memoria, Verdad y Justicia tienen un sentido de reparación para las víctimas y para el conjunto de la sociedad porque propician la construcción de consensos básicos para la vida en democracia promoviendo sobre esta base la reconstrucción de los lazos sociales. La poesía siempre crea puentes, en este caso reparatorios.
¿Quien se acuerda del genocidio armenio? Pronunció Hitler para excusarse de sus matanzas, frente a sus oficiales más íntimos, dos días antes de la invasión a Polonia de 1939. Entre los años 1915 y 1923 el imperio Otomano llevó a cabo un plan de eliminación sistemática que dejó un saldo que se estima en más de 1500000 de armenios masacrados. La impunidad para los responsables del genocidio armenio fue la inspiración y la justificación para comenzar lo que sería el holocausto de judíos, gitanos, discapacitados, homosexuales, adversarios políticos, etc.
Los reclamos de Memoria, Verdad y Justicia de todos aquellos que lucharon y luchan para sostener esa convicción profunda como un norte, como una bandera contra la impunidad tiene que ser la bandera de todos para evitar que vuelva a suceder, que sea un aprendizaje para estos tiempos y para los que vendrán.
“No hay futuro sin la elaboración del pasado”, nos dice el historiador y pensador italiano Enzo Traverso, quien desde sus libros recientes nos viene advirtiendo de la radicalización de las derechas a lo largo del mundo, él nos aportó el concepto de posfascismo para tratar de entender el fenómeno que pone en riesgo las democracias en el siglo XXI y los derechos que se consiguieron en las distintas luchas sociales. Nuestro país no es la excepción.
El ejercicio de la memoria nos permite arribar a la reflexión y al análisis crítico de la historia reciente. Quedan ciudadanos argentinos que tienen que recuperar su identidad, los nietos que las Abuelas buscan, es decir, hay gente que tiene que recuperar su verdad. Hay todavía responsables impunes de los cómplices del genocidio argentino perpetrado por la última dictadura cívico militar, algunos mueren impunes protegidos por el estamento judicial por el hecho de ser poderosos como es el caso reciente de Blaquier. El reclamo de Memoria Verdad y Justicia está candente en nuestras manos, a pesar de los avances y logros, debe cuidarse y construirse día a día.
Este 24 de marzo, a 47 años del golpe y de la implementación del Terror por parte del estado, el objetivo debe seguir siendo el activo compromiso de la defensa de la vigencia de los derechos y garantías establecido por nuestra Constitución Nacional, sólo posible y sostenido por el régimen democrático.
Una de las ideas que ejerce el acto de la memoria es la Colección Versos Aparecidos de la Editorial Meveju perteneciente al Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Provincia de Buenos Aires. El espíritu de la colección está resumido en las siguientes palabras:
“Los poemarios que componen esta colección funcionan como portales hacia los deseos y sueños más íntimos de sus autores que se propone constituirse en legado para las generaciones nacidas tras el genocidio y contribuir a comprender desde una percepción ampliada, los procesos históricos actuales. Siguiendo el rastro de textos inaccesibles o censurados, así como de libretas y papeles que forman parte de archivos familiares, realiza un trabajo de edición literaria y poética, no documental. La colección se propone recrear el vínculo de trabajo imposible entre autor y editor, mientras recupera a las y los poetas del silencio, no del olvido que nunca los ha alcanzado.”
En un texto que funciona como epílogo en el primer libro de la colección, Matías Facundo Moreno sostiene:
“Los compañeros y compañeras desaparecidas eran militantes, eran padres, madres, hermanos y hermanas, hijos e hijas, eran personas comprometidas con su tiempo, eran personas que amaban. Estas poesías fueron rescatadas por sus familiares luego de la desaparición de sus seres queridos. Entendemos que es una de las responsabilidades del Estado garantizar que las memorias del pueblo no se pierdan. Y por ello creemos que la mejor forma de hacerlo, está en poder darles hoy a las y los poetas desaparecidos, la oportunidad que les fue truncada: que sus poemas sean publicados.”
El primer libro de la colección corresponde a Versos Aparecidos de Carlos Aiub, título que dará nombre a la Colección.
Carlos César Aiub nació en diciembre de 1949, en Coronel Dorrego, Buenos Aires, fue el mayor de tres hermanos. Fue monaguillo y perteneció a la Acción Católica. Se licenció en Geología por la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) e integró posteriormente el cuerpo docente de esa institución. Además de su actividad académica y política, dedicaba parte de su tiempo a la poesía.
Militó en política, inicialmente en el Peronismo de Base y luego en el Frente Revolucionario “17 de Octubre” (FR-17).
A las 9 de la mañana del 10 de junio de 1977, fue secuestrado en la vía pública de La Plata, calle 8 entre 60 y 61.
Ese 10 de junio, también secuestraron a su hermano menor Ricardo Emir Aiub que se encontraba con Beatriz Angélica Ronco, esposa de Carlos y madre de sus dos hijos. Pocas semanas después su hermana María Concepción Aiub, su esposo Rafael Caielli y el hijo de ambos, Claudio Néstor, fueron secuestrados. Todos permanecen desaparecidos. Los hijos de Carlos y Beatriz, continúan en la búsqueda de su primo Claudio.
Versos aparecidos fue publicado por primera vez en 2007 por Libros de la Talita Dorada. Los 29 poemas reunidos fueron encontrados en una libreta marca Éxito que pertenecía a Carlos Aiub y están fechados entre diciembre de 1972 y diciembre de 1975. Los mismos son una transcripción en limpio de una selección previa realizada por el propio autor. La edición de Editorial Meveju respeta el orden espacial que tenían los poemas en la libreta y también los títulos. Solo se realizaron algunas correcciones mínimas respecto de la primera edición. El material que compone el libro es el único registro encontrado hasta hoy de la producción literaria de Carlos.
La colección, se conforma hasta el momento, además del libro de Carlos Aiub con Dolores, bufandas y recuerdos de Mónica Morán (presentado recientemente para su descarga virtual); Un minuto de historia de Miguel Ángel Gradaschi; La niña que sueña con nieves de Luisa Córica y Banderas reunidas de Imar Lamonega.
Son 12 los títulos previstos para este año. La lista de las obras que se publicarán son: Versos aparecidos de Carlos Aiub (impreso); Dolores, bufandas y recuerdos de Mónica Morán (impreso); Un minuto de historia de Miguel Ángel Gradaschi (impreso); La niña que sueña con nieves de Luisa Marta Córica (en imprenta); Banderas reunidas de Imar Lamonega (en imprenta); Una sangre para el día de Dardo Dorronzoro (en imprenta); Los últimos poemas de Daniel Omar Favero; Decir Siempre de Mabel Carranza; Aquí y allá de Delfor Santos Soto; Aquí, entre magras espigas de Alicia Eguren; El camino del pueblo de Enrique Courau; Soles como dardos de Jorge Money.
Tres de estos libros pueden descargarse de la web de la editorial en el siguiente link:
https://derechoshumanos.mjus.gba.gob.ar/?cat=84
Versos aparecidos, Carlos Aiub Te cuento de las flores aquellas que decidimos un día cuidar juntos de cómo intentamos hacerlo de cómo hay que regarlas día a día para que no mueran de cómo el yuyal avanza si nosotros nos quedamos si bajamos los brazos de cómo las hormigas pueden matarlas de cómo sus tallos son aún débiles de cómo su verde aún no alcanza de cuánto falta para que florezcan y cuánto falta aún sembrar te cuento de las flores aquellas que decidimos un día cuidar juntos y tengo miedo de no verlas. *** Gordo ¡presente! ¡hasta la victoria siempre! La idea de la muerte que la pensás lejana esa muerte diaria con olor a balas o a picana o a miseria larga la idea por momentos ausente en las continuas idas y venidas olvidada tras la bronca o la alegría (la alegría que pretendés mentirle tantas veces a la vida porque la considerás necesaria condición militante) dejada para pensar mejor mañana o para prepararse mejor mañana esa muerte no oscura no rebuscada de los discursos metafísicos esa muerte no deseada porque querés llegar esa muerte cotidiana a pesar tuyo esa muerte se te presenta así de repente en una inesperada noticia un tiroteo un herido un nombre conocido un hospital pasan los días otra noticia un horario un adiós un recuerdo y una pena así de esta manera jodida de esta posibilidad diaria pensás en la cercanía de la muerte porque viene cargada de algunos recuerdos del cumpa que cayó aquel Gordo que iba a estudiar a la pensión tan en otra cosa como vos el que encontraste en las primeras manifestaciones de estudiantes cuando comenzaste a tantear un poco la cosa esta en la que andás descubriendo tal vez como él la historia de tu pueblo aquel con el que charlaste cuando unieron las ganas de hacer algo más el de la risa grande el de los adoquines contra las vidrieras con toda esa fuerza de gordo bueno aquel que no conociste mucho y por supuesto solo esto que anduvo por otros lados distintos aquel que encontraste unos días antes en un micro en el que venías tratando de no mirar para no saber donde bajaba aquel Gordo es el de esta noticia que te cuento es el recuerdo que te trae la idea más concreta de la muerte *** La tristeza es una figura de humo muy cierta por cierto la tristeza es una niña vestida de otoño un encuentro común aunque no la busco la tristeza es un pedazo de cielo tras la ventana pequeña de una celda es morir y no ver el triunfo. *** Trelew y uno 16 rosas rojas nacidas de madrugada regresarán cada noche de la tierra liberada (pintada callejera) Retomo la vida de ustedes inconclusa retomo la poesía aquella también inconclusa retomo mi propio camino entonces (hace tres años Trelew 22 de agosto) y busco mientras voy desempacando las viejas letras casi abandonadas intentando nuevamente redondear esta pequeña ofrenda este canto inútil este trágico recuerdo este renovado lamento y así reconstruir aquel poema consciente de que ni las viejas letras ni las nuevas sirven para mucho llegado el caso como tampoco sirven para mucho las buenas intenciones y los mejores deseos que si acaso alcanzaran para reemplazar a alguien carajo aunque este intento no pretenda eso aunque sólo se trate de regresar la memoria hasta aquella vida inconclusa de ustedes y seguirla hasta aquí y hasta más allá reflexivamente hasta el propio instante en que intentamos cuestionar nuestra ajetreada conciencia diaria aunque sólo se trate de contabilizar si querés Trelew bandera y grito de guerra de cuántos Trelew más aunque sólo se trate de volcar medio complicadamente la bronca que viene amontonándose de lejos en tiempo y esperanzas y que te enciende los puños y también la mirada aunque sólo se trate de escribir buscando escupir toda esa bronca amontonada todo el odio toda esa necesidad que te invade por momentos de acabar con medio mundo y un poco más si querés de mandar todo a la mierda aunque sólo se trate de escribir pensando (no como la forma más comprometida de pensar) en una fecha en un lugar en 16 compañeros y cómo y dónde te agarró todo eso y cómo lo trasladás a otras fechas a otros lugares y a otros 16 por cuántos más compañeros y qué tiene que ver todo eso con la vida con el compromiso con la necesidad de escribir entre otras cosas que sabés más necesarias y entonces te surge la reflexión mezcla de ironía y sonrisa cansada y las palabras que ya son lugares comunes morir para que la vida viva morir buscando recorrerle su cono de sombra a la vida morir rastreando la luz entre tanta mierda junta morir para que el hombre viva morir apostándole a las tan vapuleadas esperanzas y alegrías morir a manos de los señores defensores oficiales del amor que empuñan su civilización y democracia calibre 9 morir a manos de la propia historia que vos ayudás a hacer y que escriben otros... todavía morir... vivir... morir... vivir tal vez se trate de pura necesidad dialéctica que se yo retomo la vida de ustedes inconclusa retomo la poesía aquella también inconclusa retomo mi propio camino entonces (hace tres años trelew 22 de agosto) y busco mientras la memoria sentenciada que transcurre recompone aquella mañana fría de otra Patagonia trágica unos 50 años después junto a la soledad fría de aquella cárcel regimentosa junto a la trampa fría muy mal disimulada 16 vidas fusiladas lo único caliente 16 rosas que custodian el camino de esperanzas y alegrías 16 puños que se alzan por haberse acercado a la victoria y más allá de toda esta metáfora repensada mil veces complicada contradictoria lo real lo cierto una fe cada vez mayor en el triunfo por ustedes cumpas por ustedes